No hay cura

Mientras el pecho me es perforado,
como una flecha atraviesa
todo lo que tiene a su paso,
me enfurece saber que no puedo hacer nada.

Quedo quieto, inerte e inmóvil,
sin saber como poder reaccionar,
mientras intento arréglamelas a
como puedo
se que no voy a poder resistir.

Mientras parece que he sido besado
por un jaguar que ha desgarrado
toda mi triste alma nocturna
que no sabe descansar.

He sido victima de esta nueva enfermedad
mientras no puedo defender
pues no hay cura
para vos.

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